Taj-Mahal: Nadie se conoce así mismo hasta que ha padecido India es de los países más bellos del globo. Inolvidable en el día y cautivadora en la noche, el país seduce al viajero con colores indescriptibles y tradiciones milenarias. Todo en ella transmite y enriquece si sabes escucharla. Hasta el polvo de sus carreteras parece […]
Taj-Mahal: Nadie se conoce así mismo hasta que ha padecido
India es de los países más bellos del globo. Inolvidable en el día y cautivadora en la noche, el país seduce al viajero con colores indescriptibles y tradiciones milenarias. Todo en ella transmite y enriquece si sabes escucharla. Hasta el polvo de sus carreteras parece narrar los secretos que guarda. Como escribí hace tiempo, «India es más que cinco letras»… Es tan profunda, que he necesitado tiempo para asumir el impacto del edificio que la resume sin palabras: el Taj-Mahal.
La estructura de mármol macizo provoca tristeza, ausencia y suplicio. Creen los indios que el río Yamuna impregna el lugar con sentimientos que desafían al raciocinio, pues la muerte allí despliega su hechizo.
El Taj-Mahal fue declarado Patrimonio De La Humanidad en 1983 e incluido desde el año 2007 en la lista de las Siete Maravillas del Mundo Moderno. Junto a las Siete Maravillas del Mundo Antiguo forman los catorce destinos de peregrinaje planetario sobre los que más leyendas se han escrito.
El lugar es, en esencia, un grandioso mausoleo de mármol blanco edificado entre 1631 y 1648 por orden del emperador mogol, Shah Jahan. Situado en la ciudad de Agra, su construcción está rodeada de un halo de misterio, ya que es inexplicable el sentimiento que embarga al contemplar lo que no es solo mármol y piedra arenisca, sino poesía hecha arquitectura.
Edificado como ofrenda póstuma del emperador a su esposa favorita, Mumtaz Mahal, se estima que fue necesario el esfuerzo de unos veinte mil obreros para terminar el imponente conjunto.
Innumerables historias describen como Shah Jahan, en la «oscuridad» confusa que provoca el dolor y la locura, ordenó cercenar las manos de los arquitectos una vez terminaron los planos para que no pudieran volver a obrar edificio alguno que empañara la grandeza del Taj-Mahal. No hay ninguna referencia constatada que de credibilidad a esas suposiciones, pero existen textos que aseguran que era práctica habitual mutilar a todos aquellos que conocieran los secretos de las grandes construcciones de la antigüedad.
Circulan miles de escritos sobre esta extraordinaria obra arquitectónica. La creatividad frente a ella se desborda y arrodilla, pues la considera diosa a la que rendir pleitesía. Nadie sabrá nunca la amargura, dolor y agonía que soportó el emperador, que, desolado ante la muerte de su amada, no tardó en seguirla a la tumba. Al término del hermoso mausoleo, Shah Jahan fue condenado a arresto domiciliario en el fuerte de Agra, donde pasó el resto de sus días. Con la mirada perdida, a través de una pequeña ventana contemplaba el Taj-Mahal consumiéndose enloquecido por los recuerdos… Quizás soñando que el frío mármol pudiera despertar a la vida. En su desesperación, el Taj-Mahal era ser vivo que amaba y sentía.
La más hermosa tumba que se haya concebido
Caminé desde el Taj-Mahal hacia el Fuerte de Agra; un paseo de poco más de dos kilómetros en los que me preguntaba si Shah Jahan, más que prisionero de unos muros no fue recluso y esclavo de la nostalgia. Allí, en la fortaleza, escuché por vez primera «hablar» a la India. Tal era la intensidad de sus palabras que sentí que la historia era verídica.
Cuentan que ningún proyecto que presentaba el encargado de la obra era aprobado por el emperador, pues no creía que reflejara el sentimiento que lo consumía. Este nacía del dolor más infinito y más devastador: el que mata la cordura. Shah Jahan, convencido de que solo sintiendo el desgarro por la pérdida de un ser amado entendería lo que le pedía, mandó asesinar a la esposa del encargado, y este, una vez pudo «entender», plasmó su sufrimiento con mármol y piedra arenisca. Pena y desolación que alcanzó la máxima expresión en la cúpula; en su inmensa cúpula.
Fue así como el emperador consiguió que la imagen del Taj-Majal conmueva aún hoy; a la vez, recuerda el infierno en que se puede convertir la vida. El dolor, aparece en cada detalle de la construcción, individual, ajeno, errático, fulgurante… dulce y necesario.
Leyenda cruel que muestra que el amor puede provocar la violencia más desmedida, pero también la ternura más infinita.
Un abrazo.
Maica Rivera
Artículo publicado el día 2 de febrero 2018 en periódico nacional LA RAZÓN en edición impresa.
Reportaje emitido el 29 de marzo 2018 en LA RAZÓN TV
Just superb ???? ???? marvellous. Beautiful, what more can one say!!
In the Taj-Mahal little more can be said … its feeling emerges from every corner, pain and beauty confuse you .. A hug
बहुत अच्छा लगा मेरे देश की अद्भुत और ऐतिहासिक इमारत के बारे में देखकर । इस लेखन में सटीक जानकारी दी गयीहै ।और भी ऐतिहासिक स्थान और इमारतें हैं यहां उनके बारे में भी लेखन हो सकता है।
भविष्य में भारत में लौटने और अपने सभी स्मारकों और संस्कृति के बारे में लिखना खुशी होगी। एक बड़ा गले लगाओ
Maica Rivera
Saludos amiga Maica ,muy interesante sus publicaciones felicitaciones por ese enorme trabajo de poder conocer y vivir diferentes paises con costumbres diversas .Esperemos que algun dia se decida venir a Ecuador con 4 regiones diferentes en donde estaremos a las ordenes y sentirnos orgullosos de tenerla.Feliz dia y un Abrazo!!
Alfredo, Ecuador es un país que espero conocer dentro de unos meses, los primeros asentamientos de población datan del 12000 a.C -me hechizan las civilizaciones antiguas- vuestra historia, cultura y tradición es para muchos viajeros irresistible, pero para mí es más que eso, he leído mucho sobre tu Tierra y creo que encierra esa magia especial que transforma un texto en poema…así que seré yo quién se sienta orgullosa cuando Ecuador sea el lugar de mis crónicas. Un abrazo.
Maica Rivera.
Nice Article Maica. I am from India and happy to know that you visited Agra to gain a bit of knowledge about the Taj Mahal. It’s really one of the fantastic cemeteries of India., however, Did you see the wall of that room of the Red Fort where Saha Jahan spent his last days as a prisoner of his son named Aurangzeb? There was a little hole in that wall covered with a lens. If you put your eyes in that lens, the Tajmahal will be looking in full size. It’s really an amazing experience to see Taj Mahal in that lens. It was the last prayer of Saha Jahan to his son to arrange such a way that he always can see the memory of his wife.
Thank you so much Maica for visiting India. You are most welcome again and again. 🙂
Thank you Amar, I hope to return to India. A hug
Maica Rivera
hate her or love her
What an ending you presented
A beuautiful finishing touch
A monument of life or a monument of death
Another story yet tells so long about one’s history
Sadness milestone
Should all visitor comment to real aspect of building built for
Or thinking about abeauty of its
Hate her or love her, as a beautiful building
My dear Miaca, again n again i feel so lost with your a beauty sense of writing art
Lost on deep of touches of your love being lovely
Keep it all
Thank you so much angel
Dont be too tired n keep healty
Keep your meals schedul
Have a good rest so i read and eead more your art sweet heart
Wish you for the best, much love